La Redacción
Santo Domingo
Cuidar tu imagen personal es vital en cualquier ámbito en el que te desenvuelvas. Es una herramienta de comunicación que si la aprendes a manejar generará impacto en los demás.
Dentro de los elementos que tienes que fomentar para transmitir una buena imagen personal están: las emociones, tener buena actitud, cuidar la apariencia física, velar que el lenguaje corporal vaya en consonancia con lo que deseas proyectar, el autoconocimiento, el lenguaje no verbal, que muchas veces traiciona y que juegan un papel trascendental, tener un estilo de vida saludable, una autoestima fortalecida y estar consciente de qué queremos transmitir.
Recuerda que tu imagen personal es la carta de presentación que te acompañará día a día, y esa buena o mala impresión es muy difícil de cambiar ante los demás. Oscar Wilde decía: no hay una segunda oportunidad para causar una primera buena impresión.
Ten en cuenta que la imagen que transmitas a los demás en ese primer encuentro es la que en general perdurará y la que se encargará de mantener las puertas abiertas o cerradas.
Otro punto a tomar en cuenta es la forma de hablar, la entonación, la fluidez, la proyección de la voz en la conversación, el contacto visual y los gestos tanto en la expresión corporal, todo va de la mano, la sonrisa, el trato afable, mirar a los ojos a la persona, prestar atención y asimilar el tema que se está tratando.
Infórmate de los temas más relevantes y acontecimientos de impacto para que puedas aportar en la conversación.
Aunque no lo creas, estos detalles que a simple vista no percibes como cruciales pueden ser los que se queden impregnados en las personas que te rodean y marque la diferencia, para bien o para mal, tu forma de conducirte ante los demás es el mensaje que dejaras para la posteridad, somos libros abiertos, páginas en blanco para los que nos conocen, procura que la imagen que proyectes sea de excelencia.