La Redacción
Santo Domingo
Los movimientos periodísticos Convergencia y Dos Generaciones calificaron este sábado como insólito e inaceptable que desde la propia dirección del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), se selle la división de su Seccional en la ciudad de Nueva York.
Llamaron a sus colegas radicados en la Gran Manzana a no acudir a las votaciones convocadas para este sábado, tras considerar que se trata de una actitud sectaria e irracional que no toma en cuenta la necesidad de preservar la integridad del gremio.
Deploran que se prefiera sacrificar la institucionalidad y propiciar una agudización de la deteriorada imagen que la entidad tiene en Nueva York, en vez de propiciar el dialogo entre los diferentes actores en procura de una salida armoniosa al conflicto surgido.
“Es una pena que desde la dirección del CDP se prefiera dividir la seccional con la convocatoria para este sábado de nuevas elecciones, lo que representa una burla a los colegas que ya votaron y legalmente escogieron a sus autoridades, que ya fueron juramentadas”, indican.
Acusan al comité ejecutivo de crear la crisis de Nueva York, situación que atribuyen al hecho de que, “en vez de fungir como autoridades, lo hacen como fanáticos del Marcelino Vega para lo que han contado con la confabulación de la comisión nacional electoral, que encabeza el señor Luis Pérez”.
“Es una fragrante intromisión de la dirección del colegio tomar parte de un tema reservado exclusivamente a la comisión electoral, órgano que aún mantiene vigencia hasta que se produzca la juramentación de las nuevas autoridades”, indica.
Observa que las votaciones celebradas en Nueva York el pasado 27 de agosto transcurrieron con total transparencia y que el único alegato usado para anularla, es que la plancha del Marcelino Vega no estuvo en el momento en que se contaron los votos.
“Aclaramos que ellos se excluyeron en desacuerdo con que se validaran una parte de los votos que se hicieron de manera no presencial. Nuestros movimientos aprobaron que esos votos no fueran incluidos, pero el problema es que perdieron las elecciones y eso no lo admiten”.
Afirman que “hicimos todo lo posible para convencer tanto al Marcelino Vega como a la comisión nacional electoral de que se hiciera una revisión del proceso, a lo que se negaron por la sencilla razón de que, aun excluyendo los votos a distancia, legalmente perdieron las elecciones”.
“La división pudo evitarse con la revisión que pedimos dado el hecho de que las boletas fueron firmadas y selladas por el presidente y el secretario, (este último un alto dirigente local del Marcelino Vega), las firmas de los votantes están estampadas en el padrón y, fundamentalmente, los votos nacionales fueron validados por la comisión nacional”, explican.
Advierten que el proceder arbitrario e irracional que asumen los dirigentes del CDP constituye una violación fragrante al derecho de los que acudieron a votar en orden el pasado 27 de agosto.
“Esa actitud es parcial, sectaria, impropia de una autoridad y no solo carece de sentido común, sino que refleja por qué el Marcelino Vega ha convertido tanto al CDP como al SNTP en entelequias que solo sirven para sus fines personales”, denuncian.