La Redacción
Santo Domingo
En los últimos días se ha estado desarrollando con dificultades que rayan en lo caótico, el ingreso de personas a la República Dominicana a través del aeropuerto Las Américas (AILA) y de la frontera con Haití.
Anoche hubo un congestionamiento de casi dos horas en el AILA luego de que arribaran vuelos desde Nueva York y otros lugares, y los inspectores de migración (todos jóvenes recién designados) resultaban insuficientes para atender a la gran cantidad de pasajeros, entre ellos turistas extranjeros.
En cada una de las cabinas de migración, diseñadas para que dos inspectores operen de manera simultánea, apenas había uno.
Tras permanecer casi dos horas paradas, en un ambiente caluroso, muchas personas protestaron a viva voz.
En procura de resolver el problema, los nóveles inspectores optaron por hacer los chequeos de forma expresa, sin revisar de manera minuciosa los pasaportes y demás documentos de los viajeros.
En forma paralela, en las redes sociales están circulando de manera profusa videos en los que se observan haitianos entrando al país, casi en forma de avalancha, para participar en los mercados fronterizos binacionales, sin ser chequeados ni cumplir requisito alguno.
