Agencias
Nueva York, Estados Unidos
Un tribunal de Nueva York encontró este lunes culpable de tráfico de cocaína a Geovanny Fuentes Ramírez, un narcotraficante al que el Gobierno de EE. UU. considera ‘socio’ del presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, cada vez más acorralado por la Justicia estadounidense.
Los 12 miembros del jurado, que comenzaron sus deliberaciones la tarde del viernes pasado, determinaron hoy que la Fiscalía había demostrado más allá de la duda razonable la veracidad de los tres cargos contra el acusado de tráfico de cocaína y de posesión de armas y de artefactos de destrucción, que podría acarrear una sentencia a cadena perpetua.
Tras conocerse el veredicto, Hernández respondió con un tuit en inglés y español criticando el proceso y calificándolo de un medio para redactar ‘titulares dramáticos para promover el falso testimonio de los narcos que derrotamos’.
‘Cualquier narrativa sobre la batalla contra el narcotráfico en Honduras que omita la reducción sin precedentes del 95 % (datos oficiales de USA) que logramos, generalmente es solo un vehículo para titulares dramáticos para promover el falso testimonio de los narcos que derrotamos’, escribió el presidente de Honduras.
DOS AÑOS ACOSANDO AL PRESIDENTE DE HONDURAS
A pesar de las estadísticas que blande Juan Orlando Hernández en su defensa, la Fiscalía estadounidense lleva ya dos años insistiendo una y otra vez en que Honduras es un narcoestado y que Hernández, los exmandatarios Porfirio Lobo y José Manuel Zelaya, el vicepresidente, Ricardo Arias, y otros altos responsables políticos, judiciales y de seguridad han aceptado sobornos a cambio de proteger y facilitar el contrabando de drogas en Honduras.
La primera ofensiva contra el presidente Hernández, contra el que todavía no hay ninguna acusación formal en Estados Unidos, comenzó con la detención de su hermano ‘Tony’ Hernández en noviembre de 2018.
En 2019, como parte de dicho proceso, la Fiscalía implicó al mandatario en una conspiración para usar dinero del narcotráfico con el fin de mantenerse en el poder.
En total, habría recibido al menos 1,5 millones de dólares en sobornos como apoyo a su carrera presidencial a cambio de protección, según afirmó en el tribunal el exalcalde Alexander Ardón.
Juan Orlando Hernández calificó entonces de ‘falsas y perversas’ las afirmaciones de que había usado dinero del narcotráfico en su campaña de 2013, dando comienzo a un cruce de acusaciones y negaciones entre la Fiscalía de EE.UU. y la presidencia hondureña que continúa hasta hoy.
Sin embargo, el veredicto de culpabilidad contra Tony Hernández, que escuchará su sentencia la próxima semana, dio un espaldarazo a las autoridades estadounidenses.